que no contemplen
todos los “géneros de violencia”…
Yo puedo decir con toda confianza
Y por la experiencia personal que he tenido,
Que una visión completa de la verdad es posible
Sólo cuando uno practica una no violencia total.
Mahatma Gandhi
Llegamos tarde. Estamos llegando tarde los investigadores y trabajadores de la salud al problema de la violencia. En el mundo al revés en que vivimos, nos acostumbramos a vivir como si la violencia no existiera, o como si fuera un problema ajeno o de menor cuantía; o como si fuera parte natural del paisaje de la sociedad contemporánea. Y mientras tanto ella, la violencia, ha penetrado todos los escenarios de la vida individual y social, todas las fibras del tejido colectivo y cada uno de los territorios de la geopolítica mundial.
… ni legislando contra las garantías de la libre circulación del arte y de las opiniones en la red
se beneficia a la libertad ni a la cultura del pueblo.
Manifiesto “En defensa de los derechos fundamentales en internet”
Ante la inclusión en el Anteproyecto de Ley de Economía sostenible de modificaciones legislativas que afectan al libre ejercicio de las libertades de expresión, información y el derecho de acceso a la cultura a través de Internet, los periodistas, bloggers, usuarios, profesionales y creadores de Internet manifestamos nuestra firme oposición al proyecto, y declaramos que:
- Los derechos de autor no pueden situarse por encima de los derechos fundamentales de los ciudadanos, como el derecho a la privacidad, a la seguridad, a la presunción de inocencia, a la tutela judicial efectiva y a la libertad de expresión.
- La suspensión de derechos fundamentales es y debe seguir siendo competencia exclusiva del poder judicial. Ni un cierre sin sentencia. Este anteproyecto, en contra de lo establecido en el artículo 20.5 de la Constitución, pone en manos de un órgano no judicial -un organismo dependiente del ministerio de Cultura-, la potestad de impedir a los ciudadanos españoles el acceso a cualquier página web.
- La nueva legislación creará inseguridad jurídica en todo el sector tecnológico español, perjudicando uno de los pocos campos de desarrollo y futuro de nuestra economía, entorpeciendo la creación de empresas, introduciendo trabas a la libre competencia y ralentizando su proyección internacional.
- La nueva legislación propuesta amenaza a los nuevos creadores y entorpece la creación cultural. Con Internet y los sucesivos avances tecnológicos se ha democratizado extraordinariamente la creación y emisión de contenidos de todo tipo, que ya no provienen prevalentemente de las industrias culturales tradicionales, sino de multitud de fuentes diferentes.
- Los autores, como todos los trabajadores, tienen derecho a vivir de su trabajo con nuevas ideas creativas, modelos de negocio y actividades asociadas a sus creaciones. Intentar sostener con cambios legislativos a una industria obsoleta que no sabe adaptarse a este nuevo entorno no es ni justo ni realista. Si su modelo de negocio se basaba en el control de las copias de las obras y en Internet no es posible sin vulnerar derechos fundamentales, deberían buscar otro modelo.
- Consideramos que las industrias culturales necesitan para sobrevivir alternativas modernas, eficaces, creíbles y asequibles y que se adecuen a los nuevos usos sociales, en lugar de limitaciones tan desproporcionadas como ineficaces para el fin que dicen perseguir.
- Internet debe funcionar de forma libre y sin interferencias políticas auspiciadas por sectores que pretenden perpetuar obsoletos modelos de negocio e imposibilitar que el saber humano siga siendo libre.
- Exigimos que el Gobierno garantice por ley la neutralidad de la Red en España, ante cualquier presión que pueda producirse, como marco para el desarrollo de una economía sostenible y realista de cara al futuro.
- Proponemos una verdadera reforma del derecho de propiedad intelectual orientada a su fin: devolver a la sociedad el conocimiento, promover el dominio público y limitar los abusos de las entidades gestoras.
- En democracia las leyes y sus modificaciones deben aprobarse tras el oportuno debate público y habiendo consultado previamente a todas las partes implicadas. No es de recibo que se realicen cambios legislativos que afectan a derechos fundamentales en una ley no orgánica y que versa sobre otra materia.
4 comentarios:
Qué interesante combinación Javier! La censura como arma para unos y como sometimiento para los otros...lo mismo mismito que los dos bandos de la violencia.
Saludos!
Camino
A mi también me parece muy interesante comenzar a desenmascarar los diferentes tipos de violencia a los que estamos sometidos. Considero un grna avance el que comiencen a levantarse voces que relacionan la violencia de género con la salud. Muchos de estos casos no son más que alteraciones graves de la personalidad y es fundamental que la sociedad comience a buscar alternativas a la persecución policial y a las leyes para ir buscando soluciones. Recordemos que no hace tanto que los enfermos siquiátricos se sometían a torturas en vez de a tratamientos.
Hola Colorín, con tu permiso y el de Javier, discrepo en parte de lo que comentas sobre los violentos y las enfermedades mentales.
Hablo desde mi propia opinión (ajena al mundo hospitalario, más que cómo fugaz usuaria), sin basarme en estudios, ni en datos, pero creo que suficiente marginación tienen los que sufren enfermedades mentales como para que se les compare con la gente violenta...a lo mejor algún tipo de tratamiento de la conducta necesitan algunos violentos, pero me parece complicado y peligroso meterlos a todos en el mismo saco-indulto de enfermedad mental.
Saludos!
Camino
Camino, Colorín, vuestras consideraciones, su forma y su contenido, dan categoría a este humilde post, por ello no puedo por menos que agradecer vuestras aportaciones y felicitarme por ello.
Personalmente coincido en la opinión de considerar a la violencia como acaparadora un espacio mucho más amplio y complejo que el de la “simple” enfermedad mental, por mucho que en más ocasiones de las reconocidas esta subyazca en su origen.
Salvo, claro está, que consideremos a la violencia como una manifestación más de una enfermedad que afecta a la “mente social”, como un indicador de salud mental para esta cada vez más vapuleada sociedad. La violencia forma parte de la esencia misma del ser humano, sólo necesita que se le abra la puerta. Violencia de los hijos contra los padres, violencia de los hombres contra las mujeres, violencia contra los ancianos, violencia contra los profesores, violencia terrorista, violencia contra la propia vida… ya no es suficiente hablar de la que utiliza el poderoso para someter al débil.
En cualquier caso, creo que esta “enfermedad” no se cura con tratamientos puntuales dirigidos a una sola pate de este cuerpo social “en red” que formamos todos. ¡No! a los planteamientos basados en un inútil y espurio maniqueísmo, porque así nunca le ganaremos terreno.
Gracias de nuevo.
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