Un día Bruce Munro, famoso por sus obras escultóricas, visualizó un mar interior durante un viaje a Australia. Treinta años después surge “CDSea Munro”, la primera de una serie de instalaciones autofinanciadas y realizada con materiales reciclados. Con el apoyo de la prensa del Reino Unido y la BBC Wiltshire, Munro pidió que le enviaran CDs inservibles a su taller. La respuesta del público fue masiva y llegaron CDs incluso desde California y Brasil.
Durante el pasado fin de semana -19 y 20 de junio- 140 amigos y colegas de Munro colocaron 600.000 discos compactos en un campo cerca de Knoll Kilmington, el resultado es este impresionante mar interior capaz de deslumbrar con el reflejo del sol y de la luna.
3 comentarios:
Genial, simple y llanamente.
Besitos
Me sorprende la capacidad de reunir a tanta gente, y a su vez es impresionante la respuesta.
El resultado es espectacular, unos simples CDS eso si colocados de forma estratégica, por un grupo de personas totalmente desconocidas, puedan lograr tan deslumbrante espectáculo que ayudado por la naturaleza , los cambios de luz, esos cielos según la hora del día de un resultado de una gran belleza apacible.
Gracia . Nubarrón
Qué hermoso.
Yo pienso que el impulso artístico es una característica de todo ser humano, resultado de nuestra capacidad de reflexión sobre lo que vemos y sentimos y sólo la necesidad de darle forma es específica de algunos. Una fórmula para dar sentido al tiempo que la vida nos da y luego nos quita porque así tiene que ser,independentemente de nosotros. Vivirlo sin más, es demasiado duro.
Besos
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